Toma las riendas de tu vida y aprovéchalas al máximo

En este artículo encontrarás 3 recomendaciones para fomentar el poder personal y tomar las riendas de tu vida.

Todas y cada de las personas de este planeta, tenemos la necesidad de sentirnos en control de nuestras vidas, pero al contrario de lograrlo, mientras más nos esforzamos, más parece que la vida nos ocurre, sin que podamos hacer nada al respecto.

No sé si te ha pasado, pero hay momentos en que sientes que simplemente eres arrastrada, arrastrado, por las olas, sin que puedas decidir la ruta ni las condiciones del viaje.

Yo, por mi parte, te confieso que he experimentado la sensación más de una vez en mi vida. Por eso, considero que es necesario que nos hagamos de la mayor cantidad de herramientas posibles, para transitar esta experiencia de una manera más amable.

Para ello, hoy te ofrezco 3 recomendaciones que, sin lugar a dudas, posibilitarán que recobres las riendas de tu vida:

3 consejos para tomar las riendas de tu vida y fomentar tu poder personal

1. Reconoce lo que está en tus manos

Aunque muchas de nosotras, muchos de nosotros, quisiéramos tener el poder de resolver la crisis climática en un segundo, acabar con el hambre, la guerra y la discriminación en el planeta, debemos aceptar que, sin duda alguna, somos capaces de dejar una marca en el mundo, pero no estamos en control de todo lo que sucede a nuestro alrededor.

Por eso, resulta vital identificar concretamente aquello sobre lo que tenemos el poder y aquellas cuestiones que no dependen solo de nosotras, de nosotros.

Para ello, suele resultar útil escribir al respecto

Primero, haz una lista de los asuntos que consideras que están fuera de tu control en este momento, cita al menos 10. Por ejemplo: el clima, el tráfico de la ciudad, el pasar del tiempo, las decisiones de los gobernantes, lo que otras personas piensan, dicen o hacen, los errores del pasado, etcétera.

Segundo, elabora otra lista de aquello que consideras que sí está bajo tu control y que, con algo de compromiso, podrías influenciar. Por ejemplo: lo que piensas, tus actitudes y reacciones frente a lo que sucede a tu alrededor, lo que dices, con quién pasas tu tiempo, entre otras cosas.

Luego de hacer tus listas, seguramente, te darás cuenta de que los asuntos sobre los que puedes influenciar, tienen que ver, en su gran mayoría, contigo y tu actitud frente a la vida.  

Dar este primer paso, tomar conciencia sobre lo que sucede y ponerlo en perspectiva, no solo te permitirá soltar el peso del mundo que llevas a tus espaldas, sino que te recordará que lo que piensas importa, que lo que sientes influye y que tus acciones pueden cambiar el rumbo de tu vida radicalmente.  

Ten a mano las dos listas. Cuando estés atravesando por un desafío, que te haga sentir indefensa, indefenso, revísalas y evalúa lo que está en tus manos y lo que no, con relación a la situación que experimentas. Respira profundo, enfócate en lo que puedes controlar y actúa en consecuencia.

2. Clarifica tus creencias maestras, valores y motivaciones internas

El autoconocimiento es esencial a la hora de tomar el mando de tu vida. Es imprescindible que tengas claridad sobre tus valores fundamentales, tus creencias maestras y tus verdaderas motivaciones, para que puedas actuar en coherencia con lo que, realmente, es significativo para ti.

El trabajo de conocernos puede tomar toda una vida, pero cada cosa que hacemos para profundizar en ese viaje, nos permite colocar luz en el camino y nos ayuda a tomar decisiones más acertadas, que representen genuinamente nuestros intereses y valores.

Para inspirarte en la travesía, te ofrezco algunas preguntas que pueden ser útiles:

• ¿Cuáles considero que son los valores que han guiado mi vida hasta hoy?
• ¿Qué es aquello en lo que creo firmemente?
• ¿Qué es lo más importante para mí en este momento?
• ¿Qué causas defiendo? ¿Por qué lo hago?
• ¿Qué me motiva a levantarme cada mañana?
• ¿Cuál considero que es el sentido de mi vida?

Dedica el tiempo que consideres necesario a reflexionar en estas cuestiones y escribe tus respuestas en tu bitácora personal. No existen respuestas correctas o incorrectas, tontas o brillantes, lo que salga de tu corazón será perfecto para ti.

La única consigna para este ejercicio es que elijas la sinceridad radical como prioridad y que tengas el compromiso de ir a lo profundo de tu genuino “para qué” y razón de ser.

Una vez que consideres que le diste el tiempo necesario a estas interrogantes y que hayas recolectado suficiente información, incluye un segundo ejercicio para hacerte de más datos:

Primero

Ten en cuenta tus experiencias del pasado. Indaga:

• ¿Qué vivencias crees que han influido en tus creencias y valores?,
• ¿Qué motivaciones internas han guiado tus pasos?,
• ¿Qué resultados has obtenido a partir de las decisiones tomadas desde este lugar?

Segundo

Mira hacia el futuro y reflexiona:

• ¿Qué quieres experimentar?,
• ¿Quién quieres ser en el siguiente momento de tu vida?,
• ¿Cuánto crees que ayudan tus creencias, valores y motivaciones actuales a tus objetivos futuros?,
• ¿Qué nuevos valores, creencias y motivaciones deberías cultivar?

Tercero

Reflexiona sobre tus respuestas. Tómate el tiempo necesario para pensar en lo que significan para ti, ¿cuáles son los hallazgos más interesantes?, ¿cómo encajan tus respuestas entre sí?, ¿qué descubriste?

Cuarto

Desafía tus ideas. No des nada por sentado, cuestiona todo:

• ¿Son tus valores realmente los que pensabas?,
• ¿O elegiste los que te gustaría que fueran?,
• ¿Tienes creencias maestras que han causado más desastre que bien en tu vida?,
• ¿Son tus motivos propios o los adoptaste de otras personas?

Quinto

Haz una revisión cuando lo consideres necesario. Los valores, las creencias y las motivaciones internas que hemos forjado a lo largo de nuestras vidas, no son inamovibles. A medida que crecemos y transitamos por la experiencia de vivir, cambiamos y con nosotras, con nosotros, estos conceptos también cambian.

Así que, predisponte a reexaminar lo que piensas, periódicamente, sin miedo ni culpa, hazlo como un ejercicio de reflexión, una forma de alinear tu vida a tu momento vital, liberándote de viejas cargas que te impiden avanzar.

Finalmente, habla con otros. Atrévete a pedirles su sincera opinión sobre ti, asegúrate de hacerlo con personas que consideres confiables y respetuosas. Puede que te sorprendas, tal vez descubras nuevas cosas sobre ti que no habías notado.

Conocerte más, te ayudará a tomar mejores decisiones, a ser fiel contigo misma, contigo mismo, y te dará una sensación de mayor control para tomar las riendas de tu vida, ya que sabrás lo que quieres y necesitas.

3. Establece y mantén límites claros

Los límites son esas líneas que trazas para definir lo que estás dispuesta, dispuesto, a permitir en tu vida y aquello que será inaceptable.

Estos son esenciales para mantener y proteger tu bienestar emocional, mental y físico. Cuando defines límites saludables, contigo misma, contigo mismo, y con los demás, alimentas el autorrespeto, la autoconfianza y experimentas relaciones más satisfactorias y constructivas, tanto contigo misma, contigo mismo, como con los demás.

Además, tener la claridad sobre lo que permites y no permites en tu espacio vital, te devolverá la solvencia a la hora de tomar decisiones y te dará la certeza de que pase lo que pase, tú eres quien tiene las riendas de tu vida.

Para establecer límites claros, adecuados y convenientes, toma en cuenta las siguientes recomendaciones:

Sé honesta, sé honesto, contigo

La primera persona a la que debes brindarle tu confianza y apertura eres tú, contigo las cosas deben ser absolutamente frontales, abiertas y sinceras. Así que, tómate el tiempo necesario para descubrir qué es lo que realmente necesitas, quieres, toleras y no toleras.

Puede ser que te lleve algún tiempo lograr que tu sistema de valores coincida con tus deseos y aspiraciones, pero cuando lo consigas, todo se irá ordenando y podrás entender tus verdaderos límites. 

Escribe todas tus reflexiones, eso siempre ayuda.

Comunica tus límites de forma asertiva

Una vez que tú lo tengas claro, comunica tus límites asertivamente, hazlo con firmeza, de forma directa y, a la vez, respetuosa. Adoptar una postura firme, le dará a tu interlocutor el mensaje de que hablas en serio y de que eres una persona digna de ser respetada.

Si es pertinente, comunica las consecuencias de traspasar esos límites y aplícalas. Si tú misma, tú mismo, te haces de la vista gorda cuando los límites se traspasan, los demás no entenderán la seriedad del asunto.

Sé coherente con lo que declaras

Si permites que se crucen las líneas unas veces y otras no, los mensajes pueden resultar confusos y frustrantes, provocando relaciones conflictivas y desgastantes.

Cultiva la compasión para contigo

Sé paciente, recuerda que cambiar viejos y arraigados patrones puede llevar tiempo, e incluso, una que otra recaída. Así que, abrázate en el proceso y predisponte a levantarte y empezar de nuevo las veces que sean necesarias.  

No dejes de practicar

Mientras más ejercites el músculo que pone los límites necesarios, más fácil te resultará. Al principio, tal vez sientas un nudo en la panza y tengas ganas de echarte para atrás, pero a medida que tu mente acepte que tienes derecho a establecer estas fronteras, se convertirá en algo natural.

Por otro lado, si esto de establecer límites saludables es una de esas cosas que te cuesta muchísimo hacer y no sabes por dónde empezar, pásate por: Hay límites que liberan tu vida. Te aseguro que iniciarás tu viaje con pie derecho.

Ahora, si sientes que aunque pongas lo mejor de ti para establecer límites, siempre terminas transgrediéndolos o permitiendo que otros los atraviesen, no dudes en buscar acompañamiento profesional, todas las personas necesitamos ayuda de vez en cuando. 

Listo. Hasta aquí te acompaño. Toma nota de estas recomendaciones para tomar las riendas de tu vida y ponlas a prueba.

¿Qué es lo primero que harás para tomar las riendas de tu vida?

No dejes de compartir tu experiencia en los comentarios.

Siempre es un placer aprender junto a ti.

Autora:

Cristina Navarrete Landázuri (Cris Del Viento)

Coach ontológico y escritora

Fundadora de El Refugio del Artista

Redactora en Axon Training